Un sentimiento imborrable
Pol Lozano reconoce que “llevar el brazalete del Espanyol, con el 21, es una de las cosas más especiales que te pueden pasar. Notas que está contigo y que te da fuerza”
Desde los ocho años, cuando llegó al club, Pol Lozano ha ido llevando de forma sistemática el brazalete de capitán en todas las categorías inferiores y ahora ya con el primer equipo. Por eso, nadie mejor que él para reconocer el sentimiento y el simbolismo que atesora el brazalete blanquiazul con el dorsal 21 grabado en la tela.
En el decimoquinto aniversario del fallecimiento de Dani Jarque, Pol asegura que el que fuera defensa blanquiazul “es un icono del club” y, por tanto, “es importante que toda la plantilla esté presente en un día como este, un día especial para todos los pericos”.
Explica el joven canterano del Espanyol que “el día de la inauguración del estadio yo estuve como recogepelotas en el partido” y apunta que, con el tiempo, ha compartido el mismo representante, Màgic Díaz, que “me regaló unas de las últimas botas que llevó Jarque”.
“Era un futbolista en el que me fijaba cuando estaba en el fútbol base. Para un jugador como yo, que llevo muchos años aquí, es muy especial recordar a una figura” como ha sido Dani, pura historia blanquiazul.
Pol recuerda “perfectamente” el día “y el sentimiento que me produjo” con su pérdida. “He tenido la suerte -insiste- de poder llevar el brazalete y de trasladar el sentimiento que yo he notado en el campo. Llevar el brazalete del Espanyol, con el 21, es una de las cosas más especiales que te puede pasar. Sientes que lo tienes contigo y que te da fuerza”.
Por último, apunta que “es muy importante que las personas que llegan nuevas a este club sepan el sentimiento que hay por Jarque y la importancia que tiene. Hemos de transmitirles todo lo que esté en nuestras manos para que noten que este es un día muy especial para todos nosotros”.