Tiempo de adaptación
Dídac apunta que es el momento de “ir afinando” la forma porque “las temperaturas serán más altas y los esfuerzos, más duros”
Después de dos semanas y media de preparación, Dídac Vilà reconoce que el trabajo que se está haciendo en este tiempo es satisfactorio aunque no se puede prever qué sucederá en esta fase de acondicionamiento antes de la competición.
Asegura que, tanto sus compañeros como él, trabajan fuerte “para conseguir la mejor forma posible” y recuerda que “lo más complicado ha sido tener que entrenar en casa. Llevamos tiempo con dobles sesiones con éxito y la gente está cogiendo la forma”.
Para él, este es el momento de “ir afinando más” la preparación “para conseguir mejorar poco a poco. Las sensaciones son mejores”, apunta a la vez que señala que “el tiempo dirá cómo llegaremos al momento clave”. Lo que no oculta es que “estar mejor que los rivales será algo que marcará la diferencia. Ahora has de centrarte en el día a día, en sentirte que estás trabajando y consiguiendo el objetivo de ponerte en forma”.
Argumenta, respecto a los entrenamientos realizados hasta el momento, que “nos hemos de exprimir al máximo. Será duro porque las condiciones no serán óptimas para volver a competir al 200 por cien. Las temperaturas serán más altas y los esfuerzos serán más duros. Además, no has tenido partidos de pretemporada para coger la forma. Será todo como más de golpe”.
Por último, rememora hoy, 20 años después de la Copa del Rey de Valencia, que guarda “un recuerdo brutal” de aquel día. Fue mi primer año como Alevín B. Coincidió con la llegada a la final de la Copa del Rey y encima se ganó. Fue un momento brutal que siempre recordaré. Igual que el gol de ‘murri’ de Tamudo. No sabías que había pasado, pero la pelota estaba dentro de la portería”.