Mirar hacia adelante
Ramis apunta que “nuestra obligación es lamentarnos poco y centrarnos de inmediato en el siguiente partido”
Ramis sabe que ha de rescatar detalles de lo que sucedió hace unos días en Andorra, pero con la mirada puesta exclusivamente en que “las cosas funcionen y consigamos la victoria” ante el inminente partido ante el Burgos CF, que servirá para cerrar el año. “Nuestra obligación es lamentarnos poco y centrarnos de inmediato en el siguiente partido, que es mañana”, concluye.
El técnico ha insistido en una reflexión propia de todo el mundo profesional. “Las vitrinas se llenan de trofeos, títulos y logros. Las decepciones no están en los trofeos, están en otro sitio”. Y explica que cualquier rival “también quiere hacer bien las cosas y sacar los puntos. No somos diferentes a lo que buscan otros. En los días de partido tenemos que demostrarlo y poder competir de igual a igual. Es ahí donde se refleja todo”.
El entrenador catalán es consciente de que, desde que se hizo cargo del Espanyol, ha habido partidos con buenos resultados y otros, negativos. Pero ha insistido que él hace otro análisis “porque las sensaciones van muy unidas al resultado. Si el otro día hubiéramos aprovechado las ocasiones que tuvimos y hubiésemos sacado el partido adelante, la valoración hubiera sido otra. Pero no lo hicimos. Sumar 85 sensaciones buenas no te asciende a Primera. En cambio, sumar 85 puntos, por decir una cantidad, seguro que estás muy cerca”.
Ramis, igualmente, ha reconocido que “yo soy de mirar hacia adelante” cuando se le compara el partido de Andorra y el que puede tener ante el Burgos. “Tienen connotaciones distintas por el rival. En casa estamos teniendo un buen comportamiento. No nos generan demasiadas ocasiones de gol y vamos a tratar de usar eso. Fuera de casa hemos de trabajar en otros aspectos. El foco es mañana. Hemos de sacarlo adelante. Eso tiene que traducirse en ocasiones de gol. Fuera de casa no estamos poniéndonos por encima del rival y cuando eso sucede nos cuesta sacudirnos ese dominio y ahí tiene que aparecer un equipo con más aplomo, que sea capaz de competir contra todos. Son pequeños detalles que tienen una línea muy fina. El equipo es consciente, lo sabe y ahora mismo lo que nos preocupa es que el equipo mire hacia adelante”.
Por último, también ha subrayado que entiende “las críticas de la afición cuando no ganemos. Es normal. Nosotros tenemos la culpa cuando eso suceda y hemos de corregirlo. Nos exigen para estar donde tenemos que estar. Es el nivel de exigencia de un club grande”.