Llamamiento público del RCD Espanyol de Barcelona
Somos una entidad deportiva con una trayectoria más que centenaria y un fuerte arraigo social desde que unos estudiantes catalanes nos fundaron en las aulas de la Universidad de Barcelona. Con este largo camino recorrido y desde el más estricto respeto a todos los pensamientos existentes en nuestra sociedad, llamamos, como entidad deportiva de referencia en nuestra tierra, a que los principios de respeto al prójimo y al juego limpio, tan presentes en el mundo del deporte, rijan también en los ámbitos político, social e institucional, en beneficio de todos.
La situación que se vive en Catalunya en estos ámbitos nos entristece y nos conmociona a todos los deportistas, dirigentes y profesionales de nuestra entidad y a nuestra fiel afición. Y lo hace porque sacude fuertemente las convicciones personales de todos nosotros, sean cuales sean; todas respetables. El presente conflicto nos coloca como sociedad en una indeseada situación de riesgo y creciente confrontación. La obligada neutralidad política de un club deportivo, que hemos preservado, preservamos y preservaremos por encima de todo, pretende, con absoluta buena fe, no violentar ni por acción ni por omisión los sentimientos más profundos de todos y cada uno de nuestros socios, ya que pertenecen a su ámbito más íntimo y personal.
Dicho todo lo anterior, y ante el evidente y elevado riesgo de que una escalada de acción-reacción de nuestros representantes públicos y de los diferentes agentes sociales, puedan llevarnos a una situación irreversible, el RCD Espanyol de Barcelona hace un llamamiento público a la responsabilidad, la reflexión, la sensatez, la generosidad, y la calma por parte de todos. Y así, manifestamos nuestro deseo de que los graves hechos de los últimos días y semanas no vuelvan a producirse nunca más en Catalunya, ni se vivan otros con peores consecuencias.
La democracia, las instituciones de autogobierno y la convivencia cívica han sido el marco donde nuestra sociedad ha podido progresar y, en ella, los clubes y entidades deportivas hemos podido aportar sentimientos, disfrute y pasión por el deporte a los catalanes y catalanas. Ha sido nuestra contribución para conseguir una sociedad plural y abierta como la nuestra. Estas importantes realidades, que han costado mucho de lograr, no pueden perderse. Por ello, exhortamos a todos a contribuir de nuevo a la concordia y al diálogo.
¡Paz social para Catalunya!
¡Viva el deporte!
Visca l'Espanyol!