Con cabeza y corazón
Quique cree que el derbi se ha de jugar siendo “emocionalmente fuertes” y equilibrar el partido “con inteligencia”
Quique Sánchez Flores afronta el cuarto derbi de la temporada con la ilusión de recuperar el tono del equipo y de ofrecer prestaciones similares a las que consiguió en el partido de ida de la Copa del Rey ante los azulgranas.
El técnico no olvida que “tuvimos opciones en los dos partidos y salimos satisfechos de cómo se compitió”, pero también reconoce que “hay muchos sentimientos en el partido de mañana. Emocionalmente hay que ser fuertes y equilibrar el partido con inteligencia. Hay que estar guiados también por el cerebro y no solo por el corazón”.
Intuye que el Barcelona “sacará este domingo su mejor once posible” y reconoce que el equipo está aún en fase de crecimiento y que “andamos buscando nuestra propia estabilidad. Con algunos puntos más que seguramente merecemos estaríamos hablando de cosas diferentes. Nos queda toda la segunda vuelta e intentaremos conseguirlo”.
Asegura que la eliminatoria de Copa “no nos ha producido desgaste” sino las ganas “de competir bien porque la primera victoria nos generó una alegría tremenda y la afición soñó con algo posible”.
Subraya que el equipo cree en una nueva victoria -“pensamos que es posible”- y recuerda que “hemos conseguido cosas difíciles esta temporada. No pensamos en otra cosa que no sea competir bien y lograr un gran resultado. Tenemos la obligación de hacerlo lo mejor posible. Nos debemos a nuestros aficionados. Estos son partidos que hay que ir alimentando poco a poco, pero siempre con la idea clara de no cometer errores”.
Defiende que el Espanyol “es un club espectacular, con un comportamiento neutral. Debemos estar orgullosos de nosotros. Hemos sido siempre muy respetuosos tanto desde dentro como desde fuera del club. El aficionado, en muchas situaciones, se siente pisado, pero tenemos el orgullo perico que nos mantiene vivos”.
Reconoce que la presencia estos días en Barcelona del presidente, Chen Yanseng, ha servido “para explicar cosas y así es más fácil entenderlas. No nos gusta crear falsas expectativas. La frustración es de las peores cosas que le puede pasar al ser humano. Hay que partir de unas bases sólidas y que partan de la realidad”.
También considera que no ha de haber problemas en la grada porque “nuestra afición es absolutamente coherente y sabe lo que tiene que hacer. Tengo plena confianza en la afición. Sabemos ganar y sabemos perder, ojalá seamos capaces de conectarnos, no sólo mañana, también hasta el final de temporada. Sentimos su apoyo. Ser del Espanyol no es fácil, cuando uno es de este equipo es porque hay un sentimiento muy interiorizado. Nos hacen constantemente invisibles, hay que superarlo para permanecer. Espero que prevalga el sentido común, pero no es desde nuestra afición desde donde sale todo”.
Por último, no avanza detalles de la posible alineación ni de la participación de Carlos Sánchez, el único fichaje de invierno, pero desvela que se ha de mantener la precaución con jugadores como Baptistao y Sergio García porque aún no pueden completar los 90 minutos.