Carta de despedida de Pau López
A todos los aficionados y seguidores del Espanyol
Diversas circunstancias han provocado que no me haya podido despedir de la afición del Espanyol como me hubiera gustado. Los acontecimientos se han precipitado en las últimas horas y, mi convocatoria con la selección Sub-21, ha impedido que pueda estar ahora en Barcelona.
Me gustaría, en primer lugar, explicar que la operación por la que he dejado el Espanyol es una decisión única y exclusivamente mía. Desde Ramon Robert hasta Thomas N'Kono pasando por Ángel Gómez y Quique Sánchez Flores me han reiterado en más de una ocasión su voluntad de que no saliera del Espanyol. He sido yo, quien, de manera individual, he entendido que sí era el momento.
En segundo lugar, y como decisión personal, he tenido que valorar qué camino debía seguir después de unas semanas de incertidumbre. Cuando se me abrió esta puerta pensé que sería una muy buena oportunidad para seguir mejorando y creciendo profesionalmente hasta dar el máximo de mí. Uno de los valores que me ha inculcado el Espanyol en todos los años que he estado aquí es la pasión por el trabajo, por la superación y la implicación absoluta con el club y con el resto de compañeros.
También quiero aprovechar estas líneas para dar las gracias a la afición. Siempre he notado su cariño. En los buenos y en los malos momentos. Siempre han tenido conmigo palabras de consuelo y de ánimo. Siempre me han acompañado y no puedo sino recordar esos momentos y ofrecerles mi absoluta gratitud por todo el apoyo que he recibido. Cada día. Partido tras partido. El Espanyol es mi casa desde hace 8 años y lo seguirá siendo. Es lo que dice mi corazón y mi cabeza.
No puedo saber ni imaginar qué sucederá en el futuro o cuál será el desenlace final de esta nueva etapa que ahora comienzo. Sin embargo, todos los seguidores del Espanyol pueden estar seguros de que siempre, pase lo que pase, llevaré este club en mi corazón.
Os deseo a todos mucha suerte en esta temporada llena de ilusiones. Sólo puedo pediros que no desfallezcáis en el apoyo al equipo y que, todos juntos, hagamos que esa ilusión se convierta en una realidad. Esa es nuestra fuerza. Ese es nuestro sentimiento.
Mil gracias por todo.
Hasta siempre.
PAU LÓPEZ