Carta de despedida de Álvaro González
Hola pericos.
No podía marcharme de aquí sin despedirme de toda la familia blanquiazul. Aquí os dejo unas líneas con las que espero poder manifestar mi gratitud por todo lo que he recibido.
Han sido para mí dos temporadas maravillosas a vuestro lado. Tuvimos momentos buenos y otros no tan buenos en lo deportivo. De todos me llevo un recuerdo imborrable. Me despido sabiendo que siempre que tuve el privilegio de vestir la camiseta de este club la defendí con orgullo, trabajo y sacrificio. Era lo mínimo que podía hacer por estos colores. Me llevo conmigo momentos imborrables, como esos días de Copa que tanto nos hicieron vibrar y, también, haber podido llevar el brazalete de capitán, con el 21 bordado.
A las dos juntas directivas con las que estuve, a todos y cada uno de los empleados del club que me hicieron sentir como en casa, a los utilleros, a los cuerpos técnicos, médicos y fisios, a todos los compañeros con los que compartí vestuario y a toda la ‘meravellosa minoria’… A todos: GRACIAS DE CORAZÓN por haberme hecho sentir como en casa desde el primer minuto hasta hoy. Os aseguro que os llevaré siempre en algún trocito de mí.
Gracias de un cántabro de Potes que ahora es un perico más y que os apoyará desde la distancia. ¡Siempre Mágico!
Álvaro González