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4-0: Derrota abultada

El Espanyol, superado por un Wolverhampton que aprovechó sus oportunidades

Todo huele a clásico en el Molineux Stadium. Todo tiene una liturgia, todo tiene un sentido, un culto, un respeto en un club de más de 140 años, en uno de los clásicos, de los fundadores de la, entonces, Liga inglesa. Vivió sus años dorados hace mucho tiempo y acumuló títulos y honores a mitad del siglo pasado. Se hundió no hace tanto y renació hace muy poco. El año pasado logró la séptima plaza y este año ha vuelto a Europa siguiendo una trayectoria similar a los blanquiazules. Ahora, a la hora de la verdad, en plenas eliminatorias, se sienten muy fuertes porque les avala una más que cómoda situación en la Premier.

Así las cosas, al Espanyol le tocaba apaciguar el partido, serenarlo y tratar de mostrar sus cartas siempre que pudiera. Wu Lei firmó la primera oportunidad ante un inspirado Rui Patricio, pero Diogo Jota adelantó a los locales, en un córner, en un remate que rozó antes de entrar en Víctor Sánchez.

Con el 1-0 pareció que los ‘lobos’ contemporizaron el juego para salir a la contra, pero se encontraron con un Espanyol que se fue acercando poco a poco a la meta de Rui Patricio. Un buen remate de Melendo encontró la pierna de un defensor en el área pequeña y, poco después, Ferreira no aprovechó un mal despeje de Rui Patricio que, sin embargo, reaccionó rápido para detener el remate del argentino. Y tampoco tuvo problemas para atajar un remate de cabeza de Dídac cerca ya del descanso.

El inicio de la segunda mitad comenzó con un Espanyol más agresivo en ataque. Wu Lei volvió a tener una ocasión de cabeza que salió rozando el poste. Pero, como en la primera mitad, el Wolves volvió a golpear. Un remate espectacular de Neves desde fuera del área fue inalcanzable para Andrés Prieto. Era el 2-0 y Wu Lei, casi de inmediato, volvió a cabecear rozando el poste.

Abelardo introdujo cambios para darle un poco más de consistencia al equipo y, cuando mejor estaba, llegó el tercero. Diogo Jota, que había provocado una más que discutible tarjeta a Víctor Gómez, aprovechó que le llegó la pelota dentro del área para batir a Andrés Prieto, otra vez, después de que la pelota rebotara en el tacón del propio Víctor Gómez. Y aún faltaba que Diogo firmara su particular hat trick después de una acción personal. El 4-0 fue un castigo demasiado duro para los blanquiazules que deberán completar un partido casi perfecto para lograr el pase a octavos.