2-3: Victoria de fe
El Espanyol cree hasta el final y se lleva los tres puntos de Ipurua
Subidón, locura… Tres puntos vitales; un triunfo que puede ser un punto de inflexión. El Espanyol se llevó la victoria de Ipurúa tras estar contra las cuerdas durante buena parte del choque. Los cambios aportaron mucho y tanto Salvi como Lazo, el héroe final, fueron determinantes para lograr la remontada.
El Espanyol salió al terreno de juego con la idea de no conceder ventajas en los minutos iniciales a su rival. Tras las últimas experiencias ante el Eldense y el Racing de Santander era vital superar los primeros minutos sin contratiempos que pudieran condicionar el devenir del partido. El equipo dirigido por Luis Miguel Ramis fue dando pasos, aunque no daba la sensación de estar cómodo y se vio obligado, en casi todo el momento, a correr detrás del balón. La única opción clara de los blanquiazules fue una contra conducida por Braithwaite que Jofre finalizó con un remate repelido por Luca. El posterior córner acabó con un disparo lejano de El Hilali.
El Espanyol dio la sensación de ir asentándose y de aguantar mejor las embestidas locales, aunque el exblanquiazul Stoichkov avisó con un par de remates que llevaron bastante peligro. En un partido igualado no cometer errores iba a ser clave y, lamentablemente, llegó el de los espanyolistas. Una pérdida en medio campo propició una contra rápida de los locales que acabó con el gol de Jon Bautista tras sortear a los centrales.
El Espanyol salió con otra actitud tras el descanso y pareció interpretar mejor el encuentro. Aguado comenzó a aparecer y los blanquiazules tuvieron posesiones más largas. Jofre fue el más activo por parte visitante y el que más lo intentó con desmarques, como el que estuvo a punto de acabar en el gol del empate, pero el canterano no supo definir. La aparente mejora del conjunto perico se vio truncada de manera inesperada. Stoichkov pudo ampliar la ventaja local, pero el palo lo evitó. Más acertado estuvo Nolaskoain quien se benefició de una pérdida para superar a Pacheco con un chut ajustado. El partido adquirió un tono peligroso para el Espanyol que estuvo noqueado durante algunos minutos, pero volvió a respirar gracias a un penalti provocado por Salvi. Braithwaite asumió la responsabilidad y superó claramente a Luca.
El Espanyol comenzó a creer en sus posibilidades. Ramis puso a más delanteros sobre el terreno de juego. Se lo jugó todo y Salvi, que ya había provocado el penalti, anotó el empate. Era el último minuto, pero todavía había tiempo para más. Después de un córner a favor de los locales, los blanquiazules salieron raudos a la contra. Gastón, que debutaba en Primera División, tuvo el aplomo y la calma suficiente para poner el balón en el área. Lazo lo bajó y empujado por la fuerza de todos los pericos, superó a Luca para dar una victoria orgásmica y agónica.