2-2: Ventaja desperdiciada
El Espanyol empata un partido que tenía controlado gracias a los goles de Gerard Moreno
No empezó bien la temporada para el Espanyol en casa. El conjunto blanquiazul azul vio como se escapaba una victoria que tenía prácticamente asegurada gracias a los dos goles de Gerard Moreno. Sin embargo, un nuevo gol en una jugada de estrategia devolvió la fe a un Málaga que en las postrimerías del encuentro logró empatar. De la alegría y el optimismo a la decepción por no sumar un triunfo que la grada ya celebraba.
El RCDE Stadium inauguraba la temporada 2016-2017 con un partido entre dos equipos que han dado un paso al frente y que han hecho una interesante apuesta este verano. Aunque ninguno de los dos fue capaz de ganar en la primera jornada, ambos están llamados a aportar un poco de frescura a un campeonato demasiado monopolizado por los grandes. Para el estreno en casa Quique Sánchez Flores decidió introducir varios cambios en el once titular. Víctor Sánchez ocupó el lateral izquierdo, mientras que Javi Fuego y el debutante Marc Roca formaron pareja en el doble pivote.
El Espanyol, que en Sevilla se mostró frágil en las tareas defensivas, volvió a acercarse al equipo que en pretemporada apenas concedía a los rivales. En un partido más pausado que el disputado la pasada semana en tierras andaluzas, los de Quique Sánchez Flores parecieron sentirse más cómodos. En un partido muy táctico, con pocas concesiones defensivas, fueron los blanquiazules los que intentaron crear peligro buscando la llegada por las bandas. Los espanyolistas tenían claras las ideas, pero faltaba un poco de precisión en los metros finales. Gerard estrenó el casillero de las oportunidades con un remate en semifallo que no llegó a la portería contraria. El delantero, sin embargo, no falló en la segunda oportunidad clara que tuvo y, con un poco de suerte, consiguió superar a Kameni para marcar el primer gol de la noche. Los locales pudieron ampliar la diferencia en el marcador, pero Gil Manzano anuló el gol de Álvaro por fuera de juego.
En los minutos finales del primer tiempo se soltó un poco el Málaga muy tímido durante casi todo el partido. El Espanyol, bien asentado en defensa, apenas concedió opciones a los de Juande Ramos que no remataron entre los tres palos. Un chut de Juanpi, tras una buena acción individual, fue la única ocasión de cierto peligro visitante.
Juande Ramos no acaba de encontrar la fórmula y trató de agitar el encuentro con dos cambios prácticamente consecutivos tras la reanudación. Parecía sentirse el cómodo esperando en su campo ante un adversario que no acababa de inquietar. El Espanyol optó por aprovechar la movilidad y velocidad de sus jugadores ofensivos para intentar ampliar su ventaja en el marcador. Sin embargo, fue la estrategia la que permitió a Gerard Moreno marcar el segundo gol de los blanquiazules. Los de Quique Sánchez Flores comenzaban a acariciar el primer triunfo de la temporada, pero un fallo en una jugada de estrategia Diego Llorente consiguió superar a Roberto. Tocaba sufrir.
El Málaga, animado por el gol, comenzó a tener más presencia ofensiva también fruto del enorme desgaste al que se sometió el Espanyol desde prácticamente el inicio. Los visitantes se hicieron con el gobierno del encuentro, mientras los locales cada vez tenían más problemas para conservar la posesión de la pelota. Salvo en alguna acción individual de Gerard o Caicedo, la presencia ofensiva fue disminuyendo.
El partido estaba demasiado abierto y en el intercambio de golpes, el Málaga se acabó imponiendo. Charles, que había entrado en el segundo tiempo, logró empatar para terminar amargo el debut del Espanyol de Quique en casa.