0-1: Triunfo merecido
Un Espanyol dominador cierra la temporada con una gran victoria tras un partido muy completo
San Mamés no lució, tan magnífico, como otras tardes. La afición local no evidenció grandes ganas de despedir una temporada que consideran tan anómala y lejos de los objetivos marcados el pasado julio como pudiera llegar a ser para el Espanyol. Los ‘leones’ desean poner punto final a una campaña que quieren olvidar cuanto antes y abrir un nuevo proyecto que les ilusione, después de un lustro bastante fructífero. Reconocen que ha sido un año de disgustos a los que no estaban acostumbrados últimamente. Enfrente, un Espanyol que también asume que no ha sido un buen año, que las cosas se fueron torciendo y que, sólo en este sprint final, parecen haber encontrado, de forma regular, los resultados positivos.
Los blanquiazules, como habían apuntado técnico y jugadores durante la semana, parecen haber encontrado el equilibrio en este último mes y se muestran como un bloque más compacto y efectivo. Primera aproximación y primer gol: David López, de cabeza, en el primer corner a favor. Quedaba una eternidad, pero no había nervios. Control del ‘tempo’ del partido y concentración. Suficiente para que Diego López fuese, prácticamente, un espectador más, sólo sobresaltado por un remate cercano de Adúriz que se marchó alto y un chut lejano de Muniaín. Entre medio, un remate también forzado de Baptistao y una buena acción del brasileño con remate de Gerard y la pierna salvadora de Yeray para desviar dentro del área pequeña.
La segunda mitad comenzó con los mismos síntomas. El Athletic se encontraba maniatado y su juego no fluía. El Espanyol, cada vez que conseguía sacarse la presión local llevaba un punto de inquietud, como una perfecta contra de Baptistao que Gerard no pudo rematar porque la pelota le quedó atrás o, instantes después, un chut de Sergio García, con toda la intención, que desvió Kepa.
El banquillo blanquiazul reclamó como penalti una enorme galopada de Baptistao desde casi su área hasta acercarse Kepa. Su caída, dentro del área, después de porfiar metros atrás con Córdoba, pareció más que clara, pero el árbitro no sancionó nada.
Gerard intentó el gol del año con un chute desde medio campo, pero salió desviado por poco. El conjunto de Gallego combinaba, combinaba y seguía combinando. Javi López, Gerard y Melendo firmaron una triangulación magnífica que salvó el portero vasco.
El Athletic intimidó mínimamente la portería de Diego López con algún centro lateral en los instantes finales del partido. Pero el gallego no sufrió y el Espanyol cerró la temporada venciendo en un campo emblemático y sumando 13 de los últimos 15 puntos posibles.