0-1: Sin recompensa
El Espanyol completa un buen partido en el debut de Machín, pero sigue sin ganar en el RCDE Stadium
El debut de Pablo Machín en el banquillo del RCD Espanyol no tuvo el resultado esperado. El equipo blanquiazul mostró una buena versión, luchó e hizo méritos para llevarse un mejor resultado, pero la falta de acierto en los metros finales fue una losa demasiado pesada. El Villarreal rentabilizó al máximo el gol de Ekambi en el primer tiempo para dejar a los espanyolistas sin un premio que merecieron por juego, intensidad y oportunidades.
El equipo salió con mucha energía, a veces, excesiva, y eso le costó algunas imprecisiones en el juego. Los jugadores querían agradar a su nuevo técnico y a su gente y jugaron un enorme ímpetu. Lo cierto es que el Espanyol transmitió muy buenas sensaciones, especialmente, por la actitud demostrada sobre el terreno de juego. Una acción ‘made in Sant Adrià’ entre Pedrosa y Víctor Gómez acabó con un remate alto del ‘3’ desde el punto de penalti. El Villarreal, a pesar de la buena predisposición local, no se amedrantó y en su primera llegada clara al área local, consiguió adelantarse en el marcador. Lo más positivo fue la reacción de los blanquiazules que se lanzaron en busca del empate. De nuevo Pedrosa avisó con un remate a las manos de Asenjo aunque fueron Darder y Víctor Gómez los que más cerca estuvieron de igualar con dos pedazos de remates que salieron fuera por muy poco. Calleri, antes del descanso, casi revienta el larguero con un testarazo descomunal.
La segunda parte comenzó con la misma actitud positiva de los blanquiazules y una buena oportunidad para Vargas. El argentino casi transforma un libre indirecto en el área. El Espanyol mantuvo una buena actitud aunque no le fue fácil superar a un Villarreal que supo frenar más el juego y causar más problemas a los blanquiazules. De hecho, los visitantes perdonaron el segundo en una contra de Gerard que Ekambi remató fuera. Calleri fue el perico más insistente. El argentino se fajó, corrió, no escatimó ni un esfuerzo y trató de rematar todos los balones que llegaron al área. Un ejemplo para sus compañeros. Sólo le faltó el premio del gol. Machín arriesgó dando entrada a Wu Lei por el debutante Víctor Gómez, que fue uno de los blanquiazules más incisivos. Granero tuvo la última en un remate de cabeza que salvó Asenjo de forma espectacular y evitó así una más que merecida recompensa del equipo perico.