0-0: Portería a cero y punto
El Espanyol empata ante el Villarreal en un partido sin apenas oportunidades
El Espanyol sumó un punto ante el Villarreal en un partido en el que fue de menos a más y en el que le faltó un poco de acierto para lograr un mejor resultado. El equipo blanquiazul consiguió dejar su portería a cero por primera vez esta temporada y cortar la sangría de goles en contra. Ofensivamente, sin embargo, no generó excesivo peligro y acabó arrancando un empate que el futuro dictaminará si es bueno o malo.
De nuevo las bajas obligaron a Quique Sánchez Flores a hacer cambios en el once inicial. El técnico blanquiazul decidió apostar por el mexicano Diego Reyes en el eje de la defensa y por Felipe Caicedo en la punta de ataque formando paraje ofensiva con Gerard ante las bajas de Óscar Duarte y Leo Baptistao. Javi Fuego y Marc Roca fueron los escogidos para el doble pivote, mientras que Hernán volvió al once titular.
El Espanyol se topaba con un rival confiado y en pleno crecimiento. Los castellonenses habían resuelto los seis partidos precedentes en LaLiga con tres victorias y tres empates y demostrando que el varapalo que supuso la eliminación en la Liga de Campeones está olvidado. Avisaron los jugadores blanquiazules que al equipo de Fran Escribá le gusta tener la pelota y bajo esa idea transcurrió gran parte del partido. El Espanyol optó por intentar sorprender con balones a la espalda de la defensa y aprovechar la potencia de Caicedo, pero el ecuatoriano no recibió ningún balón con claridad salvo uno que remató desviado.
El encuentro durante muchos minutos pareció una partida de ajedrez. El orden táctico predominó por encima de todo y ninguno de los dos equipos optó por arriesgar en exceso. El Villarreal tuvo más control del esférico, pero sin crear mucho peligro en la disciplinada defensa blanquiazul. Las opciones pasaban por aprovechar algún error o la inspiración puntual de algún futbolista. Sólo hubo un error y, por suerte, el inspirado fue Diego López que salvó el primer gol visitante en un mano a mano con Castillejo. La oportunidad más clara para los locales fue una jugada combinada con un primer remate de Hernán y con un segundo de Reyes que salió desviado. Poco bagaje ofensivo para pensar que el marcador podía moverse antes del descanso.
Necesitaba el Espanyol dar un paso adelante en ataque para crearle dudas al Villarreal que estaba manejando el partido con demasiada tranquilidad. Arrancaron bien los blanquiazules que pudieron conectar en un par de conexiones con Felipe Caicedo. La primera, acabó en una falta servida por Hernán y despejada por Asenjo. La segunda, en un centro de Marc Roca sin peligro. Para el equipo era importante que el ecuatoriano tuviera protagonismo y continuidad en su juego. Ofreció mejores sensaciones el Espanyol, pero los visitantes tuvieron una clarísima oportunidad para adelantarse. Afortunadamente, el remate de Dos Santos salió fuera.
Quique decidió jugársela con Aarón, otro canterano inmerso en la dinámica del primer equipo y que debutaba en Primera División. El zurdo, en su primera acción, sirvió un balón de oro a Caicedo. Desde la lontananza pareció que el ecuatoriano fue embestido por Asenjo y Víctor Ruiz, pero el árbitro no señaló nada para indignación de los jugadores blanquiazules y la grada.
Igual que el pasado domingo el partido entraba en la recta final con todo por decidirse; un escenario conocido para el equipo. Tal vez por las experiencias pasadas el equipo optó por jugar con pausa y cabeza entendiendo que el punto ante un rival como el Villarreal podía ser bueno. Los castellonenses aceptaron el trato y dejaron que el partido concluyera con reparto de puntos.