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“Me niego a decir que es una final”
Rubi confía en las posibilidades del equipo y subraya que “estoy seguro que acabaremos bien la Liga”
Un par de salidas y tres nuevas incorporaciones provocan que, a partir de hoy, el Espanyol afronte el tramo final de la Liga con expectativas renovadas. Sin decirlo, Rubi lo asume con naturalidad. Como ha venido haciendo desde que se hizo cargo del banquillo blanquiazul.
No quiere oír hablar de una final para el Espanyol en el estadio de La Cerámica, por mucho que en Villarreal lo anuncien para sí mismos sin ningún tipo de rubor. Prefiere argumentar que afronta el partido “con el máximo respeto” y con la firme voluntad “de sumar los tres puntos”. Lo que sí tiene claro, y así lo repite desde hace unos días, es que “estoy seguro de que acabaremos bien la Liga”.
Reconoce que al equipo le ha pasado factura “un enero durísimo, con 9 partidos en 30 días en los que ha pasado de todo”, pero lamenta “no haber podido seguir compitiendo” en la Copa, aunque la parte buena es que “ahora tendremos semanas completas para preparar los partidos y recuperar jugadores. Comienza una fase positiva para el equipo”.
Insiste en que “nos jugamos mucho en todos los partidos que quedan. Esto es una carrera de fondo. Nos llega este partido en una semana de cambios y con un desgaste importante, pero estoy seguro de que mañana estaremos a la altura. Una final es cuando acaba una cosa, pero sí que nos tomamos el partido con la máxima seriedad. Para mí el partido que se juega es el más importante”.
Respecto a las nuevas incorporaciones destaca que Ferreyra “es un jugador contrastado, con muy buena definición en los metros finales. Nos puede ayudar a tener más gol”. En cuanto a Wu “es un jugador con mucha movilidad, con mucho gol y me gustaría destacar de ambos que tienen un nivel de motivación altísimo”.