Atrás
“Buscaremos nuestra mejor versión”
Quique insiste en que “nos va mucho en juego” en El Molinón y asegura que “somos un buen equipo que aún puede crecer”
Quique Sánchez Flores sabe que el equipo no ha perdido la ilusión en esta recta final del campeonato. Pese al revés del pasado sábado, ante el At. Madrid, tiene claro que los tres puntos de este martes, en El Molinón, vuelven a ser importantes. En la mente sólo tiene este partido. Apunta que “nos va mucho en juego” y reitera que “queremos hacer un final de temporada bueno y para eso tenemos que seguir insistiendo en los objetivos. Tenemos equipos que están delante y otros por detrás que no están lejos de nosotros. Queremos aspirar a lo máximo: ése es nuestro objetivo”.
El técnico argumenta que el Espanyol es “un equipo que está creciendo, encontrándose. No tengo la sensación de que estemos en el punto que queremos estar. Estamos en un buen nivel y mañana buscaremos nuestra mejor versión”.
De la misma forma, avisa que “el Sporting es un rival que está apurando sus oportunidades. Es un partido complicado, complejo y si queremos crecer como grupo tenemos que saber cambiar mentalidades. Pasamos de jugar contra el At. Madrid a hacerlo contra el Sporting y son muy diferentes. No nos contenta haber perdido el sábado, pese a jugar bien, sino que queremos ser fuertes en este partido”.
Reconoce que estará pendiente -“lo justo”- del partido de esta noche entre al Athletic y el Eibar y asegura que “nadie nos puede quitar el sentimiento de felicidad que tenemos. Hemos hecho las cosas bien. Hemos disfrutado mucho y hemos sufrido poco. La sensación de crecimiento es importante, pero queremos más”.
Insiste en que el futuro del club, con el trabajo que se está haciendo, “debe ser mejor. Mejoraremos en todo: en conceptos, en jugadores, en planteamientos. No veo marcha atrás. El club maneja unas ideas para resituarse en el lugar que merece”.
Quique no quiere hacer comparaciones con lo que sucedió en el desplazamiento a San Mamés y asegura que “no podemos dar marcha atrás. No hemos tenido miedo en ningún momento de la temporada. La única incertidumbre, que no miedo, es que aún no somos un equipo reloj, puntual, que siempre hace las cosas como queremos. Somos muy exigentes siempre. Todos. En cuanto nos desordenamos un poco o no tenemos precisión, ya nos molesta y nos hace estar incómodos. Nos alegramos de la victoria en Leganés, pero sabemos que no estuvimos bien, que no somos un equipo reloj. Más adelante seremos mejores. Somos un buen equipo, pero también somos conscientes de que podemos crecer más”.